Labarre, el héroe

Chicago recibía a Arsenal en Mataderos en un partido correspondiente a la 9ª fecha del torneo Nacional B 98/99. La mala campaña que venía realizando el equipo (7 puntos en 8 partidos) ponía en la cuerda floja al técnico Jorge Mora. Arsenal se encontraba en ventaja 2 a 0 y dominaba el partido. Sin embargo a los 40 minutos del ST, Jorge Caballero lograba el descuento para el verde. El árbitro Sergio Pezzotta marcó 4 minutos de adición y el partido se esfumaba. Tiro libre para Chicago cerca del área de Arsenal sobre el sector izquierdo del ataque de Chicago. Roberto Leiga fue el encargado de ejecutar la pelota parada, envió el centro, Ariel Jesús la desvió en el camino y tras un rebote que dio Urquiza, arquero de Arsenal, César Labarre, arquero de Chicago, ponía el 2 a 2 con una palomita inolvidable.
Explosivo el festejo del DT Mora invitando a pelear a la platea de Chicago.

Candombe en Sicilia

Un nuevo caso de futbolista surgido de clubes del ascenso que termina jugando en Europa.
Anteriormente habiamos mencionado a Dely Valdez, Lavezzi y Campagnaro, hoy es el caso de Mariano Izco que esta temporada pasó de San Telmo al Catania, recientemente ascendido a la Serie A, en U$S 90.000.


Aquí respasamos su carrera en Argentina.

Mariano Izco, en su último año en inferiores en el campeonato 2000/01 (el año siguiente jugó solo el último partido en cuarta), estuvo presente en 16 ocasiones marcando un gol, en ese torneo ocupó por primera vez el banco de suplentes en un partido de primera división ante Tristán Suárez en Ezeiza el 24/02/01, siendo el técnico Claudio Zacarías.

En la temporada siguiente por el certamen 2001/02, el técnico Juan Amador Sánchez lo hizo debutar en la cuarta fecha el 4/8/01 ante el Dep. Morón ingresando por Facundo Trigueros a los 16' del segundo tiempo.Desde esa ocasión y hasta el 5/6/04 en que fue su último partido con los colores del club ante Flandria en la Isla, estuvo presente en 93 oportunidades marcando 4 goles.

Adquirido la mitad de su pase por un empresario, pasó a préstamo al Club Almagro en el 2004/05 para jugar en el fútbol mayor de AFA con Enrique Hrabina y Juan Amador Sánchez como técnicos, actuando solamente un par de partidos en primera y la mayor parte en la reserva.

En la temporada 2005/06 en la misma condición, integró el plantel del Club Tigre con Caruso Lombardi como técnico, para jugar en la "B" Nacional, estando presente en 25 ocasiones marcando 1 gol.
Detalle de los partidos jugados por Mariano Izco en primera, en los clubes San Telmo, Almagro y Tigre, sumando en los mismos 120 presentaciones en las cuales nunca fue expulsado, marcando 5 goles.
Mariano con la camiseta del Catania


Actualmente lleva jugados 23 partidos con un gol convertido en el equipo de Sicilia.

Foto y estadisticas: www.soydetelmo.com.ar

De flores, arqueros y travesaños.


Alberto Parsechian, fue un símbolo del Deportivo Armenio, de hecho lo recordamos en una entrada dedicada al ascenso a la A donde fue el DT de ese histórico equipo.

Hoy hablaremos de su etapa como jugador.
Fue arquero en las décadas de los '70 y '80. Debutó en el '69 en Sportivo Palermo cuando jugaba en la "C". Luego completó una dilatada trayectoria futbolística en Ferro, Temperley, Atlanta, Independiente de Trelew y Deportivo Armenio, donde jugó la mayor parte de su carrera.

Parsechian, además de ser el primer arquero en atajar en mangas cortas también fue un innovador al atajar con una flor en la boca durante un partido. "Estaba jugando en Armenio y una tarde enfrentábamos por la última fecha a El Porvenir, en Gerli. Ellos venían de lograr el campeonato. En el medio de la fiesta la hinchada de El Porvenir tiraba papelitos y flores. Yo estaba junto a uno de los arcos y viste como son las hinchadas que te empiezan a cargar... En ese momento me agaché y agarré un clavel, el más rojo de todos y me lo puse en la boca. Así atajé todo el partido. Algunos aplaudían, otros se reían, y el resto me puteaba. Eso no lo hacía para provocar sino para divertirme y quitarle un poco de drama a todo lo que rodea al fútbol".

Y ahora se entusiasma y recuerda una nueva anécdota: "Una vez en cancha de All Boys, descuelgo la pelota de un corner, veo a uno de mis compañeros que junto al lateral me la pedía y entonces di media vuelta e hice rebotar la pelota contra el travesaño y se la di al pie. La hincha da de All Boys estaba enloquecida, no lo podían creer, preguntaban, ¿quién es este loco?".

Fatigatti y Pedemonti, presentes



Bandera de Sarmiento de Junín, recordando a Cha Cha Cha y Todo x $2 , iconos del humor en la TV argenta.

De qué lado estás, chabón?

Es muy común que los periodiastas deportivos más reconocidos afirmen ser hinchas de un club del ascenso. Esto sucede, generalmente, para no tener problemas con los hinchas de los clubes más populares.

El caso de Matías Martin, podría seguir esta lógica, sin embargo creemos que su amor por Defensores de Belgrano es auténtico.

Si bien empezó a manifestar su fanatismo por el Dragón recién en su etapa radial, desde ese momento se encargó siempre de contrar anécdotas, recordar jugadores e informar sobre la actualidad del club.

Aunque no va muy seguido a la cancha, en su programa Basta de Todo, sigue demotrando su amor por el club de Belgrano.

Unas lechuguitas para la ensalada (?)


Las porristas de Ferro, bautizadas "Las lechuguitas" mostrando su mejor cara para HDA.

Duelo de titanes

Platense - Chicago del año 2000

Minuto 45 del segundo tiempo. Chicago implora por el final, Platense aprieta con pelotazos y el árbitro que le da la infausta noticia a los locales: se van a jugar cuatro más. Son 240 segundos de sufrimiento para unos y otros.

Minuto 48. El Beto Pascutti ordena que entre Marascia. Jiménez para el partido para autorizar el cambio, pero el técnico, viejo zorro, se demora dándole indicaciones al delantero, pierde tiempo y entonces el juez ordena seguir el partido.




Minuto 49. Ya Marascia está en la cancha, Platense tira un centro tras otro y es la hora, así lo pide a gritos todo Mataderos. Pero Jiménez decidió facturarle a Pascutti aquella avivada y deja seguir.

Minuto 51. Córner para Platense. El tiempo se cumplió con creces y sin embargo el árbitro autoriza su ejecución. Enseguida lo pagaría con un calvario de más de dos horas. ¿Por qué? Simple: cuando la pelota partió del ángulo izquierdo y alguien de Platense la peinó en el primer palo, levantó los brazos y pitó el final. Algunos de Chicago comenzaron a festejar, pero los de Platense siguieron enchufados. Bechtholdt la bajó de cabeza y Rodríguez la empujó al gol. ¿Gol?

Deliran los de Platense, se atragantan los de Chicago... Jiménez, con gestos ampulosos, dice que el partido estaba terminado. Unos se abrazan, otros se lo quieren comer. Lo corren, lo empujan, no entienden por qué no vale el tanto.
Pascutti vs. Maisterra. Enseguida la atención se desvía hacia el túnel. Pascutti se va rápido, Maisterra lo corre. Se enfrentan, el técnico alcanza a pegarle un par de cachetazos, el volante no tiene desquite porque los separan. En el vestuario de Platense acusan al Beto de haber hecho un gesto obsceno, en cambio los protagonistas le quitan trascendencia al asunto. Por aquello de los códigos del fútbol, ¿vio? Calenturas de ocasión...


La zona de vestuarios es un hervidero y Ricardo Caruso Lombardi -que fue informado por Jiménez al igual que Pascutti- está que vuela. "Me dejó más caliente el penal que cobró que el gol que anuló al final. No fue mano de Peralta", se quejaba el técnico. Su versión del incidente del epílogo era importante, porque llegó a ponerse cara a cara con Jiménez. "Pobrecito, me dio tres versiones distintas. No sabía cómo explicar qué había cobrado. Primero me dijo que lo había terminado, después que fue foul al arquero. Tenía una confusión increíble", contó Caruso.


En el de Chicago, eran todas ondas de amor y paz, obviamente. Para ellos, el penal fue clarísimo y el incidente del final una anécdota. "Cobró foul al arquero, fue un arbitraje bárbaro. Además, iban 52 minutos y había descontado cuatro. Chicago ganó bien, yo no hice ningún gesto y tampoco le gané el duelo a Caruso. Es mérito de los jugadores y de esta gente maravillosa", resumió la tarde Pascutti. Y se fue, feliz, como todo Chicago. Puso una ilusión en marcha, ganó y sumó otra polémica. Por ser su debut en Mataderos, no es poco. El Beto está otra vez en su salsa.

Fuente: Olé